En la prevención de riesgos laborales, denominamos factores de riesgo psicosocial a aquellos factores de riesgo para la salud que tienen su origen en la organización del trabajo y que pueden generar respuestas fisiológicas, emocionales (ansiedad, depresión, apatía, etc.), cognitivas (restricción de la capacidad de concentración o de toma de decisiones, etc.) y conductuales (abuso de sustancias, violencia, etc.) y que pueden ser precursoras de la enfermedad en algunas circunstancias de intensidad, frecuencia y duración.
Los riesgos psicosociales en el mundo del trabajo pueden causar problemas cognitivos, emocionales y de comportamiento que pueden dar lugar a problemas de salud física y mental, que son causados o favorecidos por las condiciones en las que se desarrolla la actividad laboral.
Los factores de riesgo psicosocial en el trabajo suelen actuar durante largos períodos de tiempo, ya sea de forma continua o intermitente. Están interrelacionados y aumentan o reducen al mínimo sus efectos en la salud según el nivel de riesgo en que se sitúen.
Las conclusiones de la segunda edición de la Segunda Encuesta Europea de Empresas sobre Riesgos Nuevos y Emergentes (ESENER-2) muestran que los factores de riesgo relacionados con los trastornos psicosociales y musculoesqueléticos son los más extendidos en los centros de trabajo de toda Europa.
Más sobre Factores de riesgo psicosociales
Según las directrices de la campaña europea 2014-15 «Trabajos saludables: cómo manejar el estrés» de la Agencia Europea de Salud y Seguridad en el Trabajo, las condiciones de trabajo que pueden causar riesgos psicosociales son las siguientes:
- Carga de trabajo excesiva o presión del tiempo
- Demandas contradictorias
- La falta de claridad en cuanto a las funciones del trabajador
- Comunicación ineficiente
- Mala gestión de los cambios dentro de la organización
- Falta de apoyo de la directiva o de los compañeros de trabajo
- Desacuerdo en las relaciones interpersonales
- Acoso, agresión y violencia
- Dificultades para combinar los compromisos laborales y personales
Consecuencias de este tipo de riesgos
Como ya se ha señalado, los entornos laborales psicosociales pueden tener consecuencias en la salud física, psíquica y social de los trabajadores.
Los trabajadores sometidos a estrés laboral pueden acabar desarrollando problemas de salud. Los efectos negativos en los trabajadores individuales tienen consecuencias en toda la organización y en la sociedad.
Para los trabajadores solteros, los efectos negativos pueden ser, entre otros:
- Irritabilidad, desánimo, ansiedad, agotamiento, depresión.
- Dificultades de concentración, dificultades para tomar decisiones, dificultades para aprender cosas nuevas.
- Adopción de hábitos nerviosos, agresividad, violencia.
A nivel de organización, los efectos negativos incluyen lo siguiente:
- Disminución del rendimiento
- Aumento del ausentismo;
- Aumento de la asistencia
- Aumento de accidentes y lesiones.
A nivel social, los efectos negativos incluyen lo siguiente:
- Aumento de los costos de los servicios sanitarios
- Disminución de la eficiencia de los servicios sanitarios
Gestión de los riesgos psicosociales
La evaluación de los riesgos psicosociales sigue siendo considerada como la mejor manera de combatirlos.
La evaluación de los riesgos es un paso necesario para detectar, prevenir y/o corregir posibles situaciones problemáticas relacionadas con los riesgos psicosociales. Suele ser una evaluación multifactorial, que tiene en cuenta aspectos de la tarea, la organización del trabajo, el entorno, el rendimiento, etc.
Los riesgos psicosociales deben ser evaluados y gestionados.
Uno de los principales ejes de la gestión de los riesgos psicosociales es la participación de los trabajadores en todo el proceso. Es necesario sensibilizar, informar al personal y lograr su participación para una adecuada gestión de los riesgos psicosociales. Es clave conseguir un enfoque participativo en el que los empresarios, los directivos y los trabajadores participen activamente en la gestión de los riesgos psicosociales.